Ciudad de México.- El gobierno de México ofreció asilo político a Evo Morales, expresidente de Bolivia, quien renunció a su cargo luego de semanas de protestas en su contra y luego de denunciar que en su país se produjo un golpe de Estado.

A través de su cuenta de Twitter, Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, informó también que una veintena de integrantes del gobierno de Evo Morales y de legisladores afines a él ya se han refugiado en las instalaciones de la embajada de México en La Paz.

Luego de tres semanas de protestas tras una reelección polémica y luego de que las fuerzas armadas le “recomendaran” la renuncia, Evo Morales anunció la tarde de este domingo su renuncia a la Presidencia.

“Renuncio a mi cargo de presidente para que Carlos Mesa y Luis Fernando Camacho no sigan persiguiendo a dirigentes sociales”, dijo Morales en un mensaje transmitido por televisión, aludiendo a los líderes opositores que convocaron las protestas en su contra.

Previamente, Ebrard había denunciado que en Bolivia existía una operación militar en curso y expresó que, si bien México mantendrá su posición de respeto, rechazaba el golpe de Estado.


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Ebrard también informó que la SRE está en alerta por los 10 mil mexicanos que viven en Bolivia.

Otros actores políticos mexicanos expresaron su postura ante la renuncia del mandatario boliviano. Cuauhtémoc Cárdenas, fundador del PRD, tres veces candidato a la Presidencia de México, expresó su “rechazo al golpe de Estado” y la urgencia de evitar “cualquier intervención extranjera en asuntos del pueblo boliviano”:



Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que el día de mañana -durante su conferencia matutina- dará a conocer la postura de su administración respecto a los hechos en Bolivia; pero aplaudió “la actitud responsable del presidente de Bolivia, Evo Morales, quien prefirió renunciar a exponer a su pueblo a la violencia”.