Más de 2 mil delitos en la colonia donde asesinaron a Ingrid Escamilla

Este lunes nos enteramos a través de diversos medios de comunicación del feminicidio de la joven Ingrid Escamilla presuntamente ocurrido a manos de su pareja, un hombre de 46 años identificado como Eric Francisco.

Los hechos, como ya han reportado los medios de comunicación, sucedieron cuando después de una discusión este sujeto presuntamente asesinó a Ingrid con un cuchillo con el que después la descuartizó, para posteriormente arrojar restos de su cuerpo al drenaje.
Vallejo de la alcaldía Gustavo A. Madero en la Ciudad de México.

Y aunque la primera impresión que nos da es que se trata de un hecho extraordinario por la brutalidad con la que fue cometido, lo cierto es que la violencia machista en la colonia Vallejo es un fenómeno absolutamente cotidiano.


● Lo primero que salta a la vista es que en la colonia Vallejo se han cometido un total de 2 mil 77 delitos de todo tipo.

● Tan sólo el año pasado, en 2019, se cometieron 521 delitos en la Vallejo, lo cual quiere decir que se cometió más de un delito al día. ¿Cómo podría una mujer sentirse segura en un lugar así?

● El delito que encabeza la lista en esta demarcación es la violencia familiar, con 185 denuncias levantadas ante la extinta procuraduría, hoy Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México.

● Hay 25 denuncias por abuso sexual.

● 9 por violación.

● 2 por acoso sexual.

● 2 por pornografía infantil.

● 1 por corrupción de menores.
La Raza y a la estación Misterios y está delimitada por las avenidas Circuito Interior, Insurgentes Norte, Cuitláhuac y Calzada de Guadalupe.

La mayor parte de los delitos denunciados ante las autoridades capitalinas están concentrados en la esquina que hacen Insurgentes Norte y Circuito Interior, justo enfrente del Hospital de Especialidades Médicas del IMSS de La Raza.

Al revisar los delitos a nivel de calle, encontramos que en Francisco Tamagno, la calle donde sucedió el feminicidio de Ingrid, hay muchas denuncias que se vienen acumulando:

● El domicilio en el que fue asesinada la joven se encuentra entre las vialidades Schumann y Donizetti.

● Ahí, tan solo en ese pedazo de calle, se han denunciado robo a transeúnte en la vía pública, amenazas, sustracción de menores, violencia familiar, robo de objetos, despojo, robo a negocio y robo a repartidor.

● Lo anterior sucede a pesar de que entre una esquina y otra de ese tramo de calle hay dos postes del C5, que se supone que hacen labores de videovigilancia las 24 horas, los 365 días del año y que supuestamente están conectadas con las autoridades de procuración de justicia de esta ciudad.
SESNSP) nos dicen que durante el año pasado se recibieron 13 mil 813 llamadas al 911 hechas desde la Ciudad de México que estuvieron relacionadas con incidentes de violencia contra las mujeres.

También en ese mismo periodo, se recibieron 566 llamadas al 911 relacionadas con incidentes de abuso sexual en la ciudad, mil 130 con hostigamiento o abuso sexual, 8 mil 824 con violencia en la pareja, 85 mil 654 con violencia familiar y 691 relacionadas con violación, casi dos llamadas al día, esto –hay que decirlo– coloca a la capital por debajo de la media nacional.

Por otra parte, este feminicidio brutal cometido contra Ingrid Escamilla sucede en medio de una confusión creada en torno a la supuesta eliminación de este delito en el proyecto de unificación de los códigos penales.

Ya ayer el fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, ha dicho que no es su intención eliminar este delito del nuevo código penal, pero el pasado 7 de febrero el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio emitió un comunicado con algunos llamados de atención que nos parece importante traer a la mesa para su reflexión.

Hizo 5 llamados importantes:

● El primero, a presentar propuestas claras para prevenir, investigar, sancionar y erradicar los feminicidios en méxico, así como la ruta de acción para su implementación que partan de diagnósticos serios sobre la problemática y los obstáculos que persisten en el acceso a la justicia para las víctimas.

● Segundo: acciones contundentes para romper la cadena de impunidad que fomenta la continuidad del delito en todos los rincones de nuestro país, tanto en contextos urbanos como comunitarios.

● Tercero: que sean las mujeres quienes lideren las propuestas de reformas y acciones que impactarán directamente en la vida de más del 50 por ciento de la población a nivel nacional.

● Cuarto: que las autoridades varones propongan lo que van a hacer con sus pares para que dejen de violentar y asesinar a las mujeres, evitando así eliminar la participación de las mujeres y echar por la borda lo que les ha costado construir como movimiento feminista.

● Y quinto: que existan sanciones a las y los servidores públicos que por su acción u omisión violenten el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia y al acceso a la justicia.

Esta es la historia de un feminicidio brutal que se inscribe en un contexto mucho más amplio de violencia machista que ocurre a nivel de calle, que ocurre a nivel de colonia y que ocurre a nivel nacional en un momento en el que la Fiscalía General de la República (FGR) y el Poder Legislativo están a punto de dar un paso hacia un nuevo Código Penal que deberá contemplar una tipificación que garantice justicia y medidas de no repetición para las miles de víctimas que hay en México.