Desde el 16 de noviembre el mundo tiene un lugar especializado para uno de los temas que provoca más tabúes: la vagina. El Museo de la Vagina, en el barrio londinense de Candem, pretende barrer con los estigmas alrededor de la anatomía de la mujer, educar sobre esa parte del cuerpo femenino y promover la salud a través de exposiciones lúdicas y talleres.

“La vagina y la vulva son partes muy estigmatizadas del cuerpo. Y eso tiene consecuencias reales, como que a la gente le de vergüenza ir al doctor cuando presentan algún síntoma. Así que la gente, literalmente, está muriendo por vergüenza, porque enfermedades como el cáncer de cuello uterino no se diagnostican a tiempo. En un esfuerzo por desestigmatizar el cuerpo hemos creado este museo”, comentó Florence Schechter, fundadora y directora del museo de la Vagina, a la agencia AFP durante su inauguración.

La idea surgió en 2017, luego que Florence Schechter se enterara de la existencia de la Faloteca en Reykjavik, Islandia, y que para la vagina solo había un espacio virtual La idea surgió en 2017, luego que Florence Schechter se enterara de la existencia de la Faloteca en Reykjavik, Islandia, y que para la vagina solo había un espacio virtual diseñado en Austria: vaginamuseum.at. Así que realizó un par de exposiciones itinerantes sobre el tema y, después, una campaña de fondeo en la que un millar de donantes aportaron 50 mil libras.

Más que un lugar con carácter erótico y curioso, el museo de la vagina se ha diseñado como un sitio didáctico para toda la población, sin importar edad o sexo. Su primera exposición temporal se llama Mitos alrededor de la vagina. Y hay una razón: la organización Jo’s Trust, dedicada a la prevención de cáncer cervical en Inglaterra, descubrió en una encuesta que a más de la cuarta parte de las mujeres entre 25 y 29 años consultadas les daba “vergüenza” hacerse un examen de cuello uterino.

Para Florence Schechter “el peor mito es que las vulvas son sucias y deben ser limpiadas. Creo que esto tiene que ver con avergonzarnos por tener cuerpos normales y naturales. La vagina y la vulva no son partes sucias del cuerpo. Se limpian solas”.

“La vagina y la vulva son partes muy estigmatizadas del cuerpo. Y eso tiene consecuencias reales”
El museo se ha planteado como misión expandir el conocimiento e incrementar la conciencia tanto sobre la salud como sobre la anatomía ginecológica; brindar confianza en las personas para hablar de la salud de los genitales; erradicar estigmas sobre el cuerpo y su placer; actuar como un foro a favor del feminismo y los derechos de la mujer y de la comunidad LGBT+; erradicar conductas cisnormativas y heteronormativas; y promover valores interseccionales, feministas y trans-inclusivos.