El juez Brian Cogan interrumpió la audiencia de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública, porque la prensa mexicana que se conectó vía telefónica no pudo respetar las órdenes de permanecer en silencio.

De acuerdo con varios periodistas que cubrieron este miércoles la audiencia, que se llevó a cabo en la Corte del Distrito Este de Nueva York, en Estados Unidos, el juez tuvo que suspender unos minutos la sesión por una serie de ruidos y conversaciones.

Periodistas mexicanos pendejos



Un noticiero de radio, conversaciones sobre un desayuno y un “me acabo de levantar”, así como la campaña de un camión de la basura fueron algunas de las cosas que los periodistas que cubrían la audiencia y el juez escucharon en la llamada.

Oscar Balmen calificó como “una vergüenza” la serie de ruidos de los micrófonos no silenciados de los reporteros. Incluso apuntó que se alcanzó a percibir un “pinches periodistas mexicanos pendejos”, escribió en su cuenta de Twitter.

La reportera Laura Sánchez Ley narró que los encargados de la audiencia afirmaron que la serie de ruidos provenientes de la prensa era “un obstáculo” para continuar, por lo que se interrumpió la sesión hasta que permanecieran en silencio.

La periodista Dolia Estévez, quien dio seguimiento también, calificó de “insólito” el acontecimiento. Narró que el juez pidió repetidamente a la prensa mexicana que silenciaran sus teléfonos. Se escuchó decir a un reportero “nos está regañando”.

La audiencia de García Luna se programó para este miércoles a las 9 a.m. en Nueva York, es decir 8 de la mañana en el tiempo del centro de México. De acuerdo con Peniley Ramírez en la audiencia anterior, se oían también voces en español, solo que en esta ocasión hubo una traductora.

Además la periodista narró que durante la llamada, cuando ya se había suspendido temporalmente la audiencia, los reporteros se intentaban silenciar entre ellos, en medio de todo se escuchó: “Chinguen a su madre, bola de periodistas mexicanos pendejos”.

Afirmó que pasaron cerca de siete minutos entre exigencias por que se pudiera mantener el orden y el silencio para arrancar la audiencia, así como los intentos de una traductora por hacer que se silenciaran los micrófonos de la prensa.


Finalmente se arrancó de nuevo con la audiencia contra el extitular de seguridad del sexenio de Felipe Calderón, quien está acusado de vínculos con el narcotráfico y tráfico de drogas hacia Estados Unidos; cerca de las 9 de la mañana (hora Ciudad de México).

El hecho causó gran descontento en redes sociales, tanto por parte de la prensa que cubría la sesión en Estados Unidos, como de periodistas nacionales. Incluso, Dolia Estévez apuntó que en algunos comentarios de la red, se sugerían teorías de sabotaje a la audiencia por parte de reporteros mexicanos, quienes podrían estar sobornados por García Luna.