Ciudad de México.- Enrique Graue Wiechers rindió protesta esta mañana como rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para un segundo periodo, que concluirá en 2023, luego de ser electo por la Junta de Gobierno de la institución.

Buena parte de su discurso, durante el acto protocolario realizado en la Antigua Escuela de Medicina del Centro Histórico de la Ciudad de México, trató acerca de la violencia contra las mujeres y de la inseguridad en las instalaciones de la universidad.

“Las recientes manifestaciones son el resultado de la justificada indignación ante la vejación histórica de la que han sido víctimas, y que ellas ya no están dispuestas a tolerar.

“Habrá que seguir actuando con determinación y contar con más personal calificado para atender estos casos y establecer un mayor número de unidades de denuncia y atención especializada, modificar las acciones que sean necesarias en el protocolo contra la violencia de género y acelerar los tiempos de respuesta”.

Graue Wiechers anunció la creación de un órgano independiente de la administración central que fortalezca el respeto a la diversidad, “promueva mayor seguridad para ellas y genere políticas de equidad en toda la universidad”.

El rector hizo mención especial de una de las protestas del pasado 14 de noviembre, en la que un grupo de jóvenes encapuchadas quemaron la bandera de México frente al edificio de Rectoría y exigieron la destitución de Graue del cargo.

En relación a estas acciones, que calificó de “vandálicas y delincuenciales”, hizo un llamado a la comunidad universitaria para que “por encima de nuestra pluralidad y diversidad, rechacemos enérgicamente la violencia, la sinrazón y las ominosas provocaciones que en fechas recientes hemos sufrido”.

“A todos nos ofenden y nos lastiman”, dijo. “Sé que el pueblo de México, el Estado mexicano y los universitarios están de nuestro lado. Les confirmo: la Rectoría a mi cargo seguirá siendo sensata y prudente, pero no será conformista o indiferentes”.

Graue aseguró que no se siente intimidado por lo que llamó “amenazas” y aseguró que “actuará en consecuencia con los ultrajes sufridos”.

También alabó el comportamiento de un grupo de estudiantes y trabajadores que “rescataron” la bandera nacional y que formaron columnas de apoyo para reponer los libros “saqueados y dispersos”. Ellos, aseguró, demostraron “el espíritu civilizatorio” de la universidad.

“Trabajaré en forma incansable por una universidad pública y laica, con compromiso social, responsable y transparente, plural y diversa, reflexiva, tolerante y segura, que se exprese con libertad y con conciencia, que sea indeclinablemente autónoma y orgullosamente mexicana. A eso aspiro y a eso me comprometo”, concluyó.

A la ceremonia, realizada en la Antigua Escuela de Medicina en el Centro Histórico, arribaron invitados especiales como la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero; el empresario Carlos Slim; el presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova; así como exrectores como José Narro y José Zarukhán.
_