Un juez de control ordenó este viernes a la Fiscalía General de la República investigar la denuncia contra Isabel Miranda de Wallace por el delito de simulación de pruebas en el caso del presunto secuestro de su hijo Hugo Alberto Miranda, el cual tiene en la cárcel a Brenda Quevedo desde hace casi 14 años y sin sentencia.

Luego de que en mayo pasado fuera presentada una denuncia por parte de la Secretaría Técnica de Combate a la Tortura, Tratos Crueles e Inhumanos del Instituto Federal de Defensoría Pública, la FGR respondió que se abstenía de este proceso, pues afirmaba que no existían elementos para iniciar una investigación en contra de Miranda de Wallace.

Entre los hechos que se encuentran en la denuncia están cateos que la entonces PGR hizo en el departamento de la calle Perugino 6 interior 4, donde supuestamente se habría llevado a cabo los delitos. En un primer cateo el 15 de julio de 2005, no se encontró evidencia alguna relacionada con el hijo de Miranda de Wallace.

“En el mismo no se encontró a la víctima de los hechos que nos ocupan Hugo Alberto Wallace Miranda, ni a ninguna otra persona, asimismo no se localizaron documentos, armas de fuego, dinero en efectivo, drogas, por lo que de conformidad con la finalidad del cateo este fue con resultados negativos”, dice el documento.

Sin embargo, en febrero de 2006, se requirió otro cateo en el mismo inmueble y en este se encontró, según los peritos, una licencia de conducir debajo de una alfombra y restos de sangre en el baño, incluso cuando el departamento fue habitado casi un año después del primer peritaje por Rodrigo Oswaldo Martínez, quien es empleado de Isabel Miranda de Wallace y quien no fue citado a declarar en ningún momento.

Además, la denuncia asegura que Miranda de Wallace habría simulado que “José Enrique del Socorro Wallace Diaz era el padre biológico de Hugo Alberto, cuando en realidad, el padre biológico es Carlos León Miranda”.

Miranda de Wallace asegura que se trata de una campaña de distracción de los imputados y que la Defensoría Pública está jugando un papel de juez y parte.