El general José Francisco Gallardo Rodríguez afirmó que para él, los sucesos ocurridos en Tlatlaya son un crimen de Estado. Narró que las fotografías revelaban claramente un fusilamiento y habló de ocultamiento de pruebas por parte del ejército mexicano.

En entrevista para En Contexto, con Rubén Luengas, el general encarcelado por solicitar que hicieran investigaciones sobre violaciones a los derechos humanos por parte del ejército en 1993, mencionó algunas características que denotan el crimen contra las 22 personas ejecutadas en 2014 en Tlatlaya, Estado de México.

“El día 30 de junio de 2014 sucedió un fusilamiento de 22 personas en Tlatlaya a raíz de la lucha contra las drogas de Felipe Calderón, creo que viene concatenado con la detención del general Cienfuegos”, afirmó el general.

El general Gallardo narra cómo vio las primeras fotografías y para él estuvo claro que lo de Tlatlaya fue un fusilamiento, pese a que las autoridades militares afirmaron que lo ocurrido fue un “enfrentamiento”.


El ejército y el mando militar ocultaron pruebas, movieron las evidencias y modificaron todo el escenario de donde fue la ejecución
El viernes pasado el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, denunció que la Fiscalía General de la República pretende cerrar el caso Tlatlaya “sin investigar cabalmente los hechos”, esto pese a que en entrevistas a diversos rangos militares, lograron obtener nueva información sobre el caso.


El caso está perfectamente bien documentado por una investigación del Pro Juárez, hay documentos y perfectamente bien definidas las líneas de mando. Sin embargo, estos militares fueron ascendidos en el último año de la administración de Peña Nieto”, dijo el general.