Por: Alan Lara

El 14 de abril de 2016 se vivía en Anfield una de las remontadas más recordadas de los últimos años en competiciones europeas, con permiso de la de los ‘Reds’ al Barcelona. Esta fue la vuelta de los cuartos de final de la Europa League donde había un empate a 1 en el global entre el Liverpool y el Dortmund. Los alemanes parecía que daban la estocada con dos goles en menos de 10 minutos.


Los de Klopp parecía que estaban en la lona pero en una segunda parte espectacular terminaron empatando a 4 el global. En el tiempo agregado vendría Dejan Lovren para firmar la remontada y el pase a la siguiente ronda.


Aún cuando el Liverpool no ganó ese torneo, esta fue la gran primera demostración del monstruo que estaba construyendo Jürgen Klopp. El alemán siguió perfeccionando detalles con el equipo y esto hizo que pocos años después fueran subcampeones de la Champions y la Premier y levantarán la Orejona en 2019.