Una policía encubierta fingió ser pasajera de un taxi para lograr la captura del feminicida de Tlalpan, un hombre identificado como Arturo ‘N’ y quien fue vinculado a proceso por el asesinato de una mujer en diciembre del 2020.

Su nombre es Fanny y es policía de investigación de la Fiscalía de Feminicidios, de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México. Así se publicó en el noticiero de Dennise Merker, donde el reportero Arturo Sierra dio a conocer que el hombre era taxista.

Tome un taxi como pasajera normal. Era muy conocido por el pueblo y lo identificaban como una persona intachable, una buena persona. Tuvimos que infiltrarnos algunos policías, entre ellos yo”, narró Fanny. 

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El viernes pasado, la fiscal general Ernestina Godoy, informó que Arturo ‘N’, un hombre de 44 años relacionado con el delito de feminicidio, fue vinculado a proceso por el homicidio de su pareja sentimental en octubre de 2020. 

Además, se le identificó como “posible feminicida serial”, ya que habría cometido el asesinato de otras tres mujeres en la alcaldía Tlalpan, en 2016, 2018 y 2019

La policía encubierta que fingió ser pasajera de un taxi

Fanny es la policía encubierta que fue esencial para la captura del feminicida de Tlalpan. El hombre le quitó la vida a su pareja, una mujer de 39 años, el 31 de octubre de 2020. De acuerdo con las investigaciones, Arturo ‘N’, se ganaba su confianza tratando de enamorar a sus pasajeras

“En el transcurso del viaje, él menciona tener hijas y que le daba miedo que salieran por que era una zona muy peligrosa”

El reportero narra que el hombre le reveló información clave a Fanny, la policía encubierta. Detalles sobre los feminicidios fueron dichos por el criminal durante el viaje en taxi de la agente. 

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“En su afán por quedar bien con ella, Arturo ‘N’ le reveló datos de cómo y dónde habría asesinado a sus víctimas, y la forma en que habían quedado los cuerpos”, explica el reportero.    

Los agentes de la Policía de Investigación también dieron a conocer que las mujeres víctimas cumplían el perfil de empleadas del hogar, de entre 35 y 43 años, que frecuentaban el servicio de taxi.