La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha castigado a los maestros de asignatura que se han organizado para exigir sus derechos. Entre las represalias que han identificado son quitarles horas de clase, no asignarles grupos, e incluso, han llegado a despedirlos.

Entre las demandas de los profesores se encuentran mejorar sus condiciones de trabajo, alzas salariales, seguro de gastos médicos mayores, además “denuncian la falta de contratos por tiempo indeterminado (que no concluyen cada periodo lectivo)“, de acuerdo con Contralínea.

“Al respecto, el profesor Miguel Rangel Aguilera –profesor del Colegio de Ciencias y Humanidades Naucalpan– explica a Contralínea que las autoridades universitarias utilizan sistemáticamente esas tres estrategias para castigar a los profesores de asignatura que se organizan y protestan. Y los contratos temporales que firman los académicos de asignatura, expone, facilitan la represión contra quienes se organizan”, se lee en la investigación.

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El pasado miércoles, aproximadamente de 30 maestros los Colegios de Ciencias y Humanidades (CCH) acudieron a la Rectoría de la UNAM para manifestarse exigir que se establezca una nueva Ley Orgánica Universitaria.

El profesor Héctor Mora Zebadúa, vocero de la “Asamblea de los Cinco CCHs comentó a Contalínea “si nuestros estudiantes de las facultades pueden votar por presidente y jefe de gobierno, por qué diablos no van a tener la capacidad de votar para [elegir a] su director. Es un absurdo, una incongruencia”.

Entre las exigencias de los profesores de los CCH se encuentran un aumento salarial y pidieron definitividad laboral. “Es un problema crónico en la universidad, tanto los salarios muy bajos, como que el 70 por ciento de la planta docente no tiene definitividad; entonces, cada semestre o cada año la gente se queda prácticamente sin trabajo, con la esperanza de que ‘ojalá me den grupo’, ‘a ver si alcanzo’”, mencionó un profesor del CCH Vallejo.

El profesor de asignatura, Rangel Aguilera, quien lleva 26 años trabajando en la UNAM, denuncia que ha sufrido un intento de represión debido a su actividad política.

“Fue denunciado ante instancias universitarias por “opiniones verbales y escritas en una reunión virtual para levantar el paro en CCH Naucalpan”, misma que fue realizada el pasado abril, presenciada por hasta 300 personas y transmitida por YouTube y Facebook”, explica Contralínea.

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