“La miel de maple no existe”, explicó la Procuraduría Federal del Consumidor, quien detalla que el producto en realidad está compuesto por un jarabe con saborizantes de maple. No tiene relación con la miel, pues esta solo la producen las abejas. 

La institución compartió que la denominación correcta de lo que conocemos como “miel de maple” es jarabe de arce. En su forma natural, es un endulzante que se obtiene de la savia del árbol de arce, uno de los más emblemáticos de Canadá, cuya hoja aparece en su bandera.  

Los productos que vemos en los supermercados, de jarabe color oscuro, son productos procesados y se elaboran con almidón de maíz saborizado, se llaman jarabe sabor maple y no son naturales, a diferencia del jarabe de arce.

En la edición de febrero de la Revista del Consumidor, la Profeco informa que la miel solo la pueden producir las abejas, por lo cual “llamarle miel a otros productos es incorrecto” de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana. 

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No es miel de maple, es jarabe sabor maple

Los jarabes sabor maple, son de color oscuro y se elaboran con almidón de maíz saborizado, contienen azúcar y colorantes, al igual que saborizantes naturales para asemejar el sabor. En cambio, explica la Revista del Consumidor, el jarabe de arce es un producto natural y 100% orgánico.  

Además informa que el costo promedio por 100 ml de los jarabes sabor maple es de $9 pesos, comparado con el precio de $69 pesos promedio por 100 ml en que se vende el jarabe de arce. 

Foto: Revista del Consumidor

En cuanto a la rapidez en que la “miel de maple” puede aumentar tu glucosa en la sangre, la Profeco informa que esta puede ser de 115, tango que se considera alto, por lo cual no se aconseja el consumo del jarabe sabor maple en personas que padecen diabetes

“El índice glucémico mide la capacidad de un alimento para elevar la glucemia, cuando es mayor de 55 se considera un alimento de alto índice glucémico”, explica la Profeco.