El Gobierno de México reveló información que le entregó la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) sobre unas conversaciones de 2014 entre la policía de Iguala y presuntos miembros del narcotráfico sobre los 43 normalistas de Ayotzinapa, desaparecidos en el sexenio de Enrique Peña Nieto. 

El viernes pasado la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia en el Caso Ayotzinapa dio a conocer comunicaciones realizadas el 26 de septiembre y el 4 de octubre de 2014, entre Francisco Salgado Valladares, comandante municipal de Iguala, y Gilberto ‘Gil’, identificado parte del grupo Guerreros Unidos. 

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“Tengo unas camas para aterrizarlos, páseme a los detenidos”, dijo el ‘Gil’ al policía de Iguala, quien accedió a liberar a los normalistas. 

Las conversaciones sobre los 43 de Ayotzinapa

La primera de las conversaciones sobre los 43 desaparecidos de Ayotzinapa consta de una cuartilla y detalla cómo el policía le reporta al miembro de Guerreros Unidos la captura de los estudiantes. Mientras que el ‘Gil’ confirma que se hará cargo de entre 17 y 21 normalistas.

“Según son Ayotzinapos pero andan encapuchados y armados. Ya tenemos varios detenidos”, dice Salgado Valladares. A lo que ‘Gil’ responde que se los “pase por el camino a Pueblo Viejo” y él los “recibe”. 

El policía le confirma al miembro del crimen que son 21 personas las que iban en un autobús para salir de Iguala. “Ya se están estacionando los del autobús para que los revienten ustedes”, le comenta Salgado a el ‘Gil’.

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Asimismo el policía menciona que tienen a otras 17 personas en “la cueva” y el integrante del narcotráfico le responde: “sí, entrégame a todos los detenidos”. 

Finalmente la conversación entre ambos acuerda reportar a las autoridades que no se hicieron detenciones: “Dígales que no agarró nada”, menciona ‘Gil’. “Sí, así mero le dije al secre, que no se hizo ninguna detención”, dice el policía de Iguala.

Otra de las conversaciones sobre los normalistas de Ayotizinapa, publicada por Segob, comparte el intercambio entre Alejandro Palacios, alias ‘El Cholo’ y Ramón, un posible policía municipal de Tepecoacuilco, Guerrero.

Aquí confirman que el ‘Gil’ contaba con fosas clandestinas y, para el 4 de octubre de 2014, cuando se reportan los mensajes, ya habían sido descubiertas. ‘El Cholo’ reporta que “acaban de encontrar fosas clandestinas en Pueblo Viejo” y Ramón contesta que “algún 28 abrió la boca”.

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“Quería que les soltaran aunque sea a 10, como estuvieran, para calmar un poco”, detalla Ramón. 

Organizaciones responden a la revelación

Al respecto, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, perteneciente a la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia en el Caso Ayotzinapa (CoVAJ) advirtió que “es riesgoso” difundir dicha información en una investigación en curso: “puede comprometer el éxito de la misma”.

“Se confirma que el Ejército ocultó información desde 2014 y que siguió administrándola después de que, por Decreto Presidencial, se le impusiera en diciembre de 2018 la obligación de entregar a las autoridades civiles todos los elementos que tuviera sobre el particular”, comentó.

Mientras que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) rechazó “enfáticamente” la difusión de la información, pues podría “alertar a presuntos perpetradores”, reporta La Jornada.