La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó Jesús Héctor o Héctor Luis Palma Salazar, alías El Güero, fue absuelto de la acusación en su contra de delincuencia organizada.

En un comunicado, la SRE explicó que el Juzgado Segundo de Distrito de Procesos Penales Federales en el estado de Jalisco notificó a la Dirección General del Centro Federal de Readaptación Social número 1 “Altiplano”, de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSPyC), sobre dicha decisión.

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Ante ello, el Juzgado “ordenó la inmediata y absoluta libertad de Palma Salazar únicamente por el delito y causas referidas, aunque estableció que éste podría permanecer recluido en caso de encontrarse a disposición alguna otra autoridad judicial por distinto delito”.

“Para dar cumplimiento a la resolución judicial, el órgano administrativo desconcentrado de Prevención y Readaptación Social se encuentra en proceso de consultas con la Fiscalía General de la República (FGR) y las 32 fiscalías de las entidades federativas, a fin de corroborar la no existencia de causa alguna en curso contra Palma Salazar“, indicó la SRE.

Mientras tanto, la Secretaría ya consulta si Estados Unidos cuenta con alguna solicitud de extradición en contra de El Güero Palma.

Se notificó que una vez desahogadas las consultas, se procederá a lo mandatado en la sentencia del juez y según lo dispuesto por la legislación.

ANTECEDENTES DE ‘EL GÜERO PALMA’

El 2016, un juez dictó auto de formal prisión al Güero Palma, por su presunta participación en el asesinato de dos policías.

El 15 de junio autoridades de EU entregaron a México a El Güero Palma tras cumplir nueve años de condena en ese país; fue recluido en el penal de máxima seguridad del Altiplano. Es la misma prisión de la que se fugó su colega y fundador del cártel de Sinaloa, El Chapo Guzmán, en julio de 2015.

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Al Güero lo acusaron de asesinar el 18 de mayo de 1995 a Antonio Contreras, subcomandante de la Policía Judicial del estado de Nayarit, y de su escolta, José Cruz.

El narcotraficante cumplió una condena de siete años de cárcel por la posesión de armas de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas en el penal de alta seguridad de Puente Grande (Jalisco), y unos días antes de quedar en libertad se le notificó de una orden de extradición a EU.

El proceso para su entrega a EU tardó cinco años y en enero de 2007 lo enviaron junto con un grupo de 14 capos. En esa nación se declaró culpable de traficar con cocaína en 2008 por lo que se le dictó una condena de 16 años de cárcel.

Sin embargo, los cinco años que pasó en un prisión a la espera de su extradición le fueron contados como tiempo cumplido de su sentencia, la cual se redujo así a 11 años, de los cuales solo cumplió nueve en la prisión de máxima seguridad de Atwater (California) por buen comportamiento.

Con información de EFE